sábado, 30 de mayo de 2015

Odio visitar los cementerios...


Odio visitar los cementerios el Día de Todos los Santos. El espectáculo de las ofrendas florales multitudinarias, rito mediante el cual los que están arriba tratan de aplacar el terror que les inspira quienes ya están abajo, me parece una abyección a duras penas disfrazada de sentimentalismo.

Cuando veo esas ancianas rigurosamente enlutadas moverse entre las tumbas floridas, como diligentes abejas de la muerte, desearía no llegar a morir nunca para no sentir el renqueante sadismo de sus pasos sobre la hierba que, indefectiblemente me cubrirá. Compadezco a los espíritus sensibles; desde sus pútridas mazmorras subterráneas, sentirán el peso de esas vidas miserables sobre sus cráneos como la más horrible de las maldiciones. La paz de los muertos no debería violarse jamás. 

Pero ya no creo, después de la atroz experiencia que he vivido, en esa supuesta paz de los muertos. O, mejor dicho, en la paz de algunos supuestos cadáveres, si es que por este término entendemos a los cuerpos cuya descomposición nos induce a creer que están "absolutamente" privados de sensibilidad. Una oscura intuición, que mi mente se esfuerza en vano por no considerar una evidencia, me dice que el imperio de la muerte no es a veces tan completo como desearían algunos desdichados.

De "Valentine", cuento de Alexander Demarest; en Biblioteca Universal de Misterio y Terror. Ediciones Uve, Madrid, 1981.

miércoles, 27 de mayo de 2015

Ordenanza sobre pompas fúnebres


Buenos Aires, noviembre 19 de 1902.

Art. 1° - Queda prohibido a los propietarios de pompas fúnebres colocar paños, cortinados y alfombras en las capillas ardientes que se improvisen en las  casas de los fallecidos, cuando la muerte sea producida por enfermedad contagiosa. Al efecto podrán exigir la presentación del certificado de defunción respectivo.

Art. 2° -  Considéranse enfermedades contagiosas las que figuran en la ordenanza de declaración obligatoria.

Art. 3° - En caso de contravención al artículo 1° las empresas sufrirán una multa de cincuenta pesos moneda nacional, y además estarán obligadas a someter el material empleado a una prolija desinfección en las estaciones respectivas, de acuerdo con las tarifas vigentes.

De "La Administración Sanitaria y Asistencia Pública de la Ciudad de Buenos Aires" por J. Penna y H. Madero; Editorial Kraft, Buenos Aires, 1910.

lunes, 18 de mayo de 2015

El "Cromlech"


Los "cromlechs" eran tumbas de la Edad de Piedra que consistían en círculos de piedras cubiertas, situadas a distancias regulares. Los cadáveres se colocaban sentados y con objetos de uso común a su alrededor.

De la "Historia de Civilización Española" de Rafael Altamira. Espasa-Calpe editores, Madrid, 1928.

domingo, 10 de mayo de 2015

Post Mortem LXXXIV: Antonio Machado


El gran poeta español Antonio Machado (1875-1939) yace en su lecho de muerte, cubierto con la bandera republicana, en su habitación del hotel Bougnol Quintana, Collioure (Francia), el 22 de febrero de 1939. A modo de homenaje, transcribo una de sus poesías más bellas y emotivas:


A LA MUERTE DE UN AMIGO

Tierra le dieron una tarde horrible
del mes de julio, bajo el sol de fuego.

A un paso de la abierta sepultura,
había rosas de podridos pétalos,
entre geranios de áspera fragancia
y roja flor. El cielo
puro y azul. Corría
un aire fuerte y seco.

De los gruesos cordeles suspendido,
pesadamente, descender hicieron
el ataúd al fondo de la fosa
los dos sepultureros...

Y al reposar sonó con recio golpe,
solemne, en el silencio.

Un golpe de ataúd en tierra es algo
perfectamente serio.

Sobre la negra caja se rompían
los pesados terrones polvorientos...

El aire se llevaba
de la honda fosa el blanquecino aliento.

Y tú, sin sombra ya, duerme y reposa,
larga paz a tus huesos...

Definitivamente,
duerme un sueño tranquilo y verdadero.

           Antonio Machado