Una visita al salón de disección. Los estudiantes Julio Echeverry, Santina A. Duchini,
Héctor Azarola Gil, Italo Mannise y Beningo Varela, "con las manos enla masa"
Al recorrer la Facultad de Medicina lo que mayormente llama la atención de los visitantes es la sala que contiene los tanque de formol para la conservación de cadáveres. Los cadáveres se usan para la enseñanza práctica de la anatomía, una de las partes más interesantes e importantes de la carrera de medicina, son de los que fallecen en el Hospital y que no son reclamados por nadie.
Otra vista de la sala de disección.
Se tienen unos días en "remojo" en formol, considerado hoy en día lo mejor para la conservación, y después, se extienden sobre las mesas de la sala de disección ante los ojos curiosos y los brazos impacientes de los jóvenes estudiantes, a los cuales entusiasta el deseo de conocer músculo por músculo y nervio por nervio, esa admirable máquina humana, tan complicada, tan bella.
Tanques de formol, para la consevación de los cadáveres.
Debido a que hace poco fue concluído el edificio, faltan todavía algunas instalaciones importantes, como la sala frigorífica, última palabra de la ciencia, para la cual ya ha comenzado a trabajar y "La Morgue", lugar donde se depositan los cadáveres recogidos en las calles, accidentes, incendios, etc. a semejanza de las que poseen todas las grandes ciudades de Europa y América.
De "La Semana", Montevideo. Año IV, N° 145, 8-jun-1912.
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