Enrique II Plantagenet, llamado de Inglaterra (Le Mans, 5 de marzo de 1133 - Chinon, 6 de julio de 1189)
Muy amargos fueron los últimos años de Enrique II de Inglaterra, quien, dice el historiador C. Bémont, sólo habría necesitado dominarse en ciertos momentos para ser un gran rey. En los últimos años de su reinado, se rebeló contra él su hijo Enrique, quien murió de fiebre en Martel. Tres años más tarde, su hijo Godofredo moría repentinamente en París. Era la época en que Inglaterra lYuchaba por conservar sus dominios en Francia. Con habilidad y astucia, el rey de Francia atrajo a su bando a dos de los hijos más influyentes de Enrique II, Ricardo Corazón de León y Juan Sin Tierra, que empezaban a sentirse impacientes del largo reinado de su padre. El monarca inglés, sorprendido por los acontecimientos, perdió Le Mans y la plaza de Tours, hasta que, rendido de cansancio y minado por la fiebre, celebró una entrevista con el monarca francés en la llanura de Colombiére, y aceptó todas sus condiciones. Sólo pidió que se le entregara la lista de los que le habían traicionado, pero el oír el nombre de su hijo Juan, la persona que más quería en el mundo, exclamó amargamente: "-¡No sigáis! ¡Ya habéis dicho bastante!" Perdió allí mismo la memoria. Estuvo delirando tres días, y murió el 6 de julio de 1189, sin haber recobrado la razón.
De "Del amor y otras cosas amenas" de Johannes Breteaux, recopilado en "Los Titanes de lo extravagante y raro". Ediciones Anaconda, Buenos Aires, 1946.
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